Ya hemos visto la gran cantidad de enfermedades que transmiten las garrapatas, las pulgas y los mosquitos. Por ello, hemos decidido hacer un artículo para contaros las formas de prevención que existen de estos parásitos.
Empecemos con un breve resumen del artículo anterior.
Síntomas que presentan las mascotas cuando les ha picado una garrapata.
Como ya veíamos en el artículo anterior, hay muchas enfermedades causadas por las garrapatas, pero la mayoría tienen unos síntomas clínicos comunes como son:
- Pérdida del apetito.
- Letargo.
- Fiebre.
- Inflamación de los ganglios linfáticos.
- Cojera
Es importante saber reconocer una garrapata cuando la vemos. Tiene el tamaño de una lenteja cuando no ha chupado sangre, no saltan, y se desplazan muy ágilmente. Además suelen alojarse en la zona de menos pelo, como ingles, pabellones auriculares y axilas. A continuación os dejamos una foto para que veáis la diferencia entre una garrapata que ha ingerido sangre y una que no.
Síntomas que presentan las mascotas cuando les ha picado una pulga.
¿Y cómo son las pulgas? Son más pequeñas que las garrapatas, aplanadas y con forma alargada, saltan mucho y se desplazan muy rápido por la piel. Ya vimos las enfermedades que pueden causar en los animales y los síntomas de que tienen pulgas son:
- Picor.
- Irritación de la piel y sarpullidos.
- Heridas y eccemas en la piel.
- Presencia de heces de pulgas en el pelaje.
Lo más importante y una pieza clave para evitar que nuestras mascotas se contagien con estos parásitos y, lo que es peor, que les transmitan alguna enfermedad, es la prevención.
Para evitar la acción de estos parásitos existen productos específicos con distintos formatos:
- Pipetas.
- Collares.
- Comprimidos.
- Sprays.
Es fundamental elegir una combinación de productos adecuada al estilo de vida de la mascota y que tengan una calidad y eficacia contrastada.
Además, es importante tener en cuenta la presencia y distribución del flebótomo, el mosquito transmisor de la leishmaniosis.
Por ello, siempre os recomendamos que antes de desplazaros con vuestra mascota, nos consultéis para que vaya completamente protegida contra los parásitos y enfermedades habituales de la zona donde os desplacéis.
Pipetas.
Es una mezcla de principios activos que se aplica externamente en la piel y que según su composición protege únicamente frente a pulgas y garrapatas o pulgas, garrapatas y flebótomos.
La eficacia de todas las pipetas tiene una duración de un mes.
Collares.
Hay gran cantidad de collares y, al igual que las pipetas, protegen frente a pulgas, garrapatas y flebótomos dependiendo de su composición.
La duración de la prevención varía entre collares y también tiene diferente duración frente a los parásitos.
Comprimidos.
Es la desparasitación más novedosa. Consiste en la administración de un comprimido y protege únicamente frente a pulgas y garrapatas.
Según el principio activo que sea, la duración puede ser de un mes o de 12 semanas.
Sprays.
Se pulverizan sobre el animal y pueden tener efecto residual o no, es decir, hay sprays que solo actúan en el momento de la aplicación y otros que, al igual que las pipetas, son efectivos durante un mes desde su aplicación.
Otros consejos para prevenir pulgas y garrapatas.
Además de usar la combinación de antiparasitarios más adecuada, os dejamos otros consejos básicos que ayudan a prevenir la aparición de estos parásitos:
- Revisar el pelaje de tu animal de manera habitual.
- Mantener una higiene adecuada cepillándolo de manera frecuente.
- Si tu mascota duerme en el exterior, es importante mantener su casetabien desinfectada.
- Lava con frecuencia la cama de tu perro para que pulgas y garrapatas no se instalen en ella ni pongan huevos.
- Mantener tu casa limpia.Pasar regularmente la aspiradora tanto en las alfombras como debajo de los sillones y muebles del hogar suma puntos para la prevención global de mascotas y familia.
- No arrancar la garrapata por la fuerza.Si encuentras una garrapata en tu animal, no es conveniente arrancarla ya que de esa forma lo único que se logra es eliminar sólo una parte del cuerpo, quedando todavía el resto del parásito adherido al perro, lo que puede provocarle infecciones.
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