La intoxicación por chocolate puede afectar a muchas especies, pero lo más  habitual es que afecte a perros, debido al fácil acceso que tienen al mismo y porque les suele gustar.

En contra de lo que se cree, los perros no se intoxican con el chocolate debido a la cantidad de azúcar que tiene, sino por la presencia de dos sustancias toxicas, que son  teobromina y cafeína.

Seguro que muchas de vuestras mascotas han ingerido chocolate en alguna ocasión y no habéis tenido nunca ningún problema. Esto se debe a que su efecto depende de la cantidad, de la sensibilidad individual y del tipo de chocolate que haya ingerido. El más peligroso es el chocolate en polvo, seguido del chocolate negro (a mayor porcentaje de cacao, más peligroso será para las mascotas). El chocolate con leche tiene una concentración de teobromina menor, por lo que para intoxicarse con éste último necesita comer una mayor cantidad respecto al chocolate negro.

La DL50, es decir, la dosis a la que mueren la mitad de los perros expuestos al tóxico, es de 300 mg/kg de peso del animal; pero los síntomas severos y la muerte pueden aparecer a dosis mucho menores y varían según la sensibilidad individual a la teobromina.

En los gatos, la DL50 es de 200 mg/kg. A pesar de ser más baja, vemos menos intoxicaciones en gato que en perro, sobre todo porque los gatos tienen un apetito mucho más selectivo y además no detectan los sabores dulces, por lo que no les llama la atención.

Por lo general, los síntomas leves, como pueden ser beber mucho (polidipsia), incontinencia urinaria, vómitos, y diarrea se pueden ver en perros que ingieren una dosis de 20 mg/kg, los efectos cardiotóxicos se ven a dosis de 40-50 mg/kg y pueden aparecer convulsiones y entrada en coma con dosis a partir de 60 mg/kg.

Otros síntomas que pueden verse a partir de dosis bajas son intranquilidad y nerviosismo.

Siendo prácticos, dos onzas de chocolate con leche por kilo de peso corporal es potencialmente mortal en perros.

 

Los síntomas suelen aparecer a las 6-12 horas de la ingestión. Normalmente empieza con sintomatología digestiva como vómitos y diarrea para evolucionar a problemas cardiacos y respiratorio, que según avanza el cuadro pueden provocar la muerte.

Por lo tanto, si tu mascota ha ingerido chocolate, es importante acudir al veterinario cuanto antes para la inducción del vómito si no han transcurrido dos horas desde la ingestión. Si han pasado más de horas, es importante estrechar la vigilancia y acudir al veterinario ante cualquier mínimo síntoma.